El Universal
EL GRAN DIARIO DE MÉXICO
MÉXICO, D. F., SÃBADO 23 DE ABRIL DE 1994
Marina Rosell cantará canciones mediterraneas frente al Templo Mayor
El apoyo al mestizaje y al intercambio cultural, contra las ideas xenofóbicas
Por JESÚS MEJIA
La xenofobia es el conflicto internacional más importante de este siglo, pero el paisaje heterogéneo humano está condenado a entenderse; de lo contrario, desembocará el caos, la catástrofe» consideró la-cantante española Marina Rosell, participante hoy del X Festival del Centro Histórico de la Ciudad de México.
Autora e intérprete de canciones del mediterráneo, en las que se ha manifestado contra el racismo y la xenofobia, la exponente del canto nuevo en la península ibérica consideró fundamental que las naciones del orbe apoyen el mestizaje y la confluencia de razas y culturas como condición de supervivencia de las sociedades.
«Ninguna cultura ha evolucionado sin el mestizaje», puntualizó la cantante catalana, quien este sábado se presentará a las 18:00 horas en la explanada del Templo Mayor del primer cuadro de esta metrópoli por sugerencia de Betsy Pecanins al comité organizador del festival.
En conferencia de prensa, acompañada de su representante Luis Ibarz, Marina Rosell, con 20 años de carrera artística, se autodenominó una artista que nació con la democracia española luego de ser censurada por el contenido de sus canciones durante el franquismo.
Expuso que en España, al igual que en México, los cantantes y grupos artísticos independientes son relegados por la música de mala calidad de factura estadounidense, por lo que tienen que sobrevivir con trabajos para mantenerse como una opción íntegra.
Dijo que su país mantiene en estos momentos «un espejismo provinciano» con respecto de Europa, en vez de mirar hada América Latina. Esto, señaló, conducirá a un fracaso en su política integracionista dado que Europa es un conglomerado de naciones con culturas y potencialidades distintas.
La autora de temas como «De qué parles», «Havanera», «Benke», «Rumba de Barcelona» y «La guerra de Cuba» también opinó que su país debe cambiar la noción de «Madre patria» que legó con tintes paternalistas el franquismo y reintegrarse al mundo que una vez colonizó en condiciones de equidad y respeto.