OVIEDO
CRÍTICA MUSICAL
Rossell, de corazón
MARIAN PIDAL/
La cantante Marina Rossell revivió el miércoles en Oviedo algunos de sus temas más aplaudidos en un concierto patrocinado por Cajastur para el ciclo ‘Música del siglo XXI’. Fiel a la imagen austera y discreta que la acompaña desde hace más de 30 años, Marina continúa siendo un icono insustituible de la canción popular catalana; impermeable al paso del tiempo y a las tendencias. Sus planteamientos ideológicos -estoicamente coherentes- y su combatividad en pro de los derechos humanos -invariablemente pacifista- le han granjeado el respeto de un público incondicional que se rinde ante la valentía irritante de sus canciones más comprometidas y que se acomoda despreocupadamente en sus versiones más plácidas del repertorio anónimo tradicional.
Rossell, cantante y cantautora, mantiene intacta su capacidad de transmitir emociones. Canta de corazón y a corazón abierto piezas con planteamientos tan distantes -pero no por ello menos emotivos- como la habanera ‘Yo te diré’, de la película ‘Los últimos de Filipinas’, o la canción republicana de la Guerra Civil, ‘El frente de Gandesa’. Esboza ternura, siempre con equilibrio y delicadeza, en los poemas de amor -‘Deslumbrada’, ‘¿Cómo te olvidaste de eso?’, ‘Perquè t’estimo’, ‘Si las palabras curan’-; mira con reverencia al pasado al recrear escenas costumbristas -‘¿De qué hablas, habanera?’, ‘Els contrabandistes’-; rescata de la caducidad mensajes al borde del silencio -‘Ha llovido’, ‘Emiliano Zapata’-, y regresa a la rebeldía de la juventud cuando interpreta el himno feminista, su himno, ‘La Gavina’.
Actuó en compañía del pianista y acordeonista Maurici Villavecchia, uno de sus más íntimos colaboradores; un músico que maneja con habilidad los tiempos que requiere la cantante y que se pliega con docilidad a sus arranques de improvisación. Llegaron a Oviedo para ofrecer un recital de habaneras. En realidad, una excusa para deleitar al auditorio con títulos emblemáticos de la ‘Nova Cançó’. Sus admiradores se lo agradecieron.